Anemia aplásica y anemia hemolítica
Anemia aplásica vs anemia hemolítica
La sangre contiene glóbulos rojos (glóbulos rojos), que contienen una proteína rica en hierro llamada hemoglobina. La hemoglobina transporta oxígeno desde los pulmones al resto del cuerpo y elimina el dióxido de carbono de las células. En la anemia, hay una disminución en los glóbulos rojos. Por lo tanto, hay una disminución de la capacidad de transporte de oxígeno de la sangre. La médula ósea es una esponja como tejido presente dentro de los huesos. Es responsable de producir glóbulos rojos, glóbulos blancos (glóbulos blancos) y plaquetas.
La anemia aplásica es una afección en la cual la médula ósea está dañada y afecta la producción de células sanguíneas. La médula ósea deja de producir células sanguíneas, mientras que la anemia hemolítica es una condición en la que hay una degradación excesiva de los glóbulos rojos. Los glóbulos rojos se destruyen antes de su vida útil normal de 120 días. La destrucción de los glóbulos rojos se llama hemólisis y por lo tanto el nombre. La anemia aplásica afecta a todas las células sanguíneas, mientras que la anemia hemolítica afecta solo a los glóbulos rojos.
La anemia aplásica es causada por la exposición a la quimioterapia, la radioterapia que se usa en los cánceres; productos químicos como insecticidas, benceno; uso de medicamentos como el cloranfenicol, antibióticos; infecciones como hepatitis, parvovirus, etc., mientras que la anemia hemolítica se observa en defectos hereditarios en la membrana de los glóbulos rojos o en la hemoglobina o en las enzimas que mantienen los glóbulos rojos. Las enzimas son proteínas que causan reacciones químicas en el cuerpo. La anemia hemolítica ocurre en la talasemia y la deficiencia de la enzima G6PD (glucosa 6-fosfato deshidrogenasa). En la talasemia, hay un defecto en la hemoglobina y se producen glóbulos rojos anormales. Estos glóbulos rojos son frágiles y se rompen fácilmente. La anemia hemolítica también tiene causas autoinmunes, es decir, nuestro sistema inmunológico ataca los glóbulos rojos y se descomponen fácilmente. Se desencadena debido a la exposición a sustancias químicas; Uso de fármacos como la penicilina, la quinina y el bazo hiperactivo.
En ambas condiciones, el paciente desarrolla síntomas de anemia como debilidad, fatiga, falta de aliento. En la anemia aplásica, hay una tendencia a infecciones, moretones fáciles, sangrado nasal y de las encías, mientras que en la anemia hemolítica, hay ictericia (coloración amarillenta de la piel / ojos), orina oscura y agrandamiento del hígado y el bazo. Durante la descomposición de los glóbulos rojos, se libera un pigmento amarillo llamado bilirrubina que causa ictericia. Podemos diagnosticar la anemia aplásica mediante pruebas como el hemograma completo (CBC) y la biopsia de médula ósea. CBC muestra disminución de hemoglobina, RBC, WBC y plaquetas, mientras que en la anemia hemolítica, CBC muestra disminución de RBC pero aumento de glóbulos blancos, plaquetas y reticulocitos. Otras pruebas para detectar anemia hemolítica incluyen lactato deshidrogenasa sérica, Haptoglobina sérica, Pruebas de orina y Prueba de función hepática que muestran niveles elevados de bilirrubina.
El tratamiento de la anemia aplásica incluye transfusiones de sangre, antibióticos para controlar infecciones e inmunosupresores (medicamentos que suprimen la actividad de las células inmunitarias que dañan la médula ósea). El trasplante de médula ósea es preferido en pacientes jóvenes. El tratamiento de la anemia hemolítica depende de la causa. En defectos hereditarios, se realiza suplementación con ácido fólico y transfusión de sangre. En condiciones autoinmunes, se utilizan corticosteroides. En casos severos, se sugiere la extirpación del bazo. Resumen En la anemia aplásica, la médula ósea se daña y deja de producir células sanguíneas. Es causada por la exposición a quimioterapia, infecciones, químicos, medicamentos, etc. Los síntomas incluyen debilidad, tendencia a las infecciones, moretones y sangrado fáciles. Se diagnostica en CBC y biopsia de médula ósea. El tratamiento incluye transfusión de sangre, inmunosupresores y trasplante de médula ósea. En la anemia hemolítica, hay una descomposición excesiva de los eritrocitos. Los RBC se destruyen antes de su vida útil normal. Es causada por defecto en la membrana celular, hemoglobina o enzimas. El paciente presenta cansancio, falta de aliento, ictericia, orina oscura, etc. El diagnóstico se realiza mediante el CBC, el perfil del hígado, la prueba de orina, etc. El tratamiento incluye corticosteroides, transfusiones de sangre y suplementos de ácido fólico. En casos severos, se aconseja la extirpación del bazo.