SPD y autismo

Anonim

El aumento en los trastornos del desarrollo neurológico, como el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), el trastorno del procesamiento sensorial (SPD, por sus siglas en inglés) y el autismo en nuestra sociedad ha requerido la necesidad de comprender mejor estas condiciones y también de investigarlas en detalle para una intervención terapéutica eficaz. Casi el 5-16% de la población infantil está afectada con SPD o trastorno de procesamiento sensorial y alrededor del 1% está afectada con autismo. Las condiciones son desconcertantes para los cuidadores y los médicos por igual. Dado que existe poco conocimiento sobre estas afecciones entre la propia fraternidad médica, muchas veces los niños están mal etiquetados con uno u otro de los diagnósticos anteriores.

El SPD y el autismo pueden parecer similares al principio, pero hay diferencias sutiles que deben tenerse en cuenta, ya que pueden ser útiles al manejar a estos niños.

¿Qué es SPD?

La SPD o trastorno del procesamiento sensorial es un trastorno del desarrollo neurológico en el que el niño no puede usar la información sensorial entrante para realizar tareas motoras efectivas. Dicho simplemente, estos niños tienen problemas para integrar lo que ven, oyen y tocan. No pueden organizarse para reaccionar ante un estímulo en particular y, por lo tanto, tienen problemas al realizar tareas cotidianas como usar ropa, bañarse, tomar líquidos, etc. Reactivo al más mínimo toque o ruido. No solo se bloquean los estímulos externos, sino también el sentido de la posición de la articulación, lo que le da a la persona una idea de la posición de sus brazos y piernas con respecto al cuerpo y el entorno, también está bloqueada. Tales niños son flojos o torpes.

Normalmente los niños interactúan con el entorno tocando, viendo y escuchando. Cualquier entrada que reciba se combina y se asocia con un nombre, lugar, animal o cosa y se crea una memoria para futuras referencias. Este bucle particular no ocurre en niños con SPD. Es como si hubiera un bloqueo en la vía sensoriomotora.

Investigadores recientes han descubierto que el problema no es solo de comportamiento; También tiene un aspecto orgánico. Todos sabemos que diferentes áreas de la materia gris en el cerebro están interconectadas a través de las vías nerviosas que forman la materia blanca. El lóbulo parietal y el lóbulo occipital son las principales áreas de procesamiento sensorial. Se ha encontrado, con la ayuda de estudios avanzados de MRI, que las conexiones entre estos dos lóbulos son menores en estos niños en comparación con los niños normales.

SPD puede deberse a factores genéticos y ambientales y se está investigando para comprender la causa subyacente de esta condición. Puede continuar en la vida adulta, lo que lleva a problemas psicológicos adicionales, como depresión, baja autoestima y alienación social. El tratamiento de SPD es a través de la combinación de terapia ocupacional e integración sensorial en un ambiente lleno de diversión. El niño aprende a enfrentar desafíos sensoriales y realiza respuestas motoras apropiadas. La terapia se transfiere a diferentes entornos como el hogar, la escuela, la oficina, el patio de recreo, etc.

¿Qué es el autismo?

El autismo también es un trastorno del comportamiento en el que el niño tiene dificultades en las habilidades sociales y de comunicación, ya que no pueden entender las señales entrantes. Los niños autistas muestran tres características básicas: problemas en la comunicación, problemas con la interacción social y comportamiento repetitivo. Estos niños tienen dificultad para mantener la vista de los ojos y tienen una capacidad reducida para leer las expresiones faciales.

La investigación realizada en estos niños con la ayuda de la tecnología avanzada de RMN ha demostrado que hay una disminución de la conectividad entre el lóbulo frontal y el lóbulo occipital y entre la amígdala y el hipocampo. Estas tres áreas son las principales responsables del procesamiento social y emocional. La mirada es una función del lóbulo frontal.

Estos niños muestran síntomas antes de los tres años. Pueden ser muy traviesos o pueden preferir estar solos y no jugar con otros niños. Pueden realizar una actividad sin sentido de manera continua. Como esta condición puede continuar hasta convertirse en adulto, los pacientes tienen problemas para entender las reglas sociales no escritas, los modales en los lugares públicos y no pueden entablar una conversación apropiada para la situación. Se consideran de mala educación o de corazón frío, ya que no pueden leer las expresiones faciales.

La enfermedad tiene una base genética y ambiental y no existe un tratamiento específico como tal. Estos terapeutas ocupacionales les dan a estos niños entrenamiento continuo en habilidades y entrenamiento conductual.

El autismo y la SPD son trastornos del neurodesarrollo que afectan a los niños. En muchos casos coexisten. Muchos de los niños autistas tendrán SPD, pero SPD no necesita ser siempre autista.